20230218

 

AQUELLAS ACEITUNERAS TRIANERAS

Las cigarreras sevillanas fueron famosas en toda Europa, siendo pintadas por numerosos pintores que escribieron sobre ellas y hasta óperas le hicieron.
Pero había aquí en Sevilla otro gremio de mujeres trabajadoras, que no por menos pintadas y escenificadas tenían menos importancia en el ámbito laboral de la ciudad, nos referimos a las aceituneras.
En el siglo XIX y hasta mediados del XX, cientos de mujeres trabajaban en los múltiples almacenes que había en Triana, dedicados al aderezo y envase de las aceitunas sevillanas, principalmente para la exportación. Era un trabajo muy duro, mientras unas sacaban el hueso de las aceitunas con unas máquinas muy peligrosas otras las rellenaban de pimientos, anchoas y coliflores, para luego envasarlas.
Estos almacenes estaban ubicados principalmente por las calles Alfarería, Pagés del Corro, Ardilla etc. Como por ejemplo, uno que existía en la calle San Jacinto, llamado del Inglés, pues su dueño era de esa nacionalidad, junto al lado de la antigua Cruz Roja.
Por las mañanas muy temprano, se podían ver a muchas de mujeres de distintas edades, algunas de ellas con bebés que llevaban dentro de unas cestas, para amamantarlos mientras trabajaban, llevando también en el invierno unas latitas llenas de carbón o cisco para prenderlas y calentarse dentro de aquellas gélidas naves donde trabajaban. 

A mediados del siglo XX fueron mecanizando todo el proceso de la manipulación de las aceitunas, además de que estas mujeres fuertes, buenas trabajadoras, independientes y solidarias, empezaron a luchar por sus derechos y sus salarios, lo que ya no interesaba a las empresas, desapareciendo los almacenes poco a poco y, con ellos, las aceituneras, como después ocurrió, a lo largo de los años, con las cigarreras, fundiciones, textiles y otras muchas empresas que formaban el tejido social e industrial de Sevilla.
Manuel G. Ponce

No hay comentarios:

Publicar un comentario