20170630


Los síntomas de la muerte

Considero que la muerte, se debe tomar, 

con conocimiento de causa, como quien afronta un problema... 
el último problema.
NO TEMO PORQUE ME VOY, TEMO POR LO QUE DEJO.
    MPH

"La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos"



Tú y yo moriremos algún día de lo mismo. Le daremos
distintos nombres: cáncer, diabetes, falla coronaria, infarto.
Un órgano dejará de funcionar y luego otro. O quizá todos
al mismo tiempo. Tú y yo nos pareceremos más que la
gente que continuará viviendo, sin importar cuál sea tu
diagnóstico inicial, ni el mío.
Morir tiene su propia biología y síntomas. Constituye un diagnóstico en sí mismo. Aunque las semanas y los días
que desembocan en la muerte pueden variar de una
persona a otra, las horas que anteceden a la muerte son
similares en la gran mayoría de los padecimientos humanos.
Algunos síntomas, como el estertor de muerte, la falta de
aire y la agitación terminal se perciben como agonizantes,
pero por lo general no son incómodos para el moribundo.
Pueden tratarse eficazmente con medicamentos. La
disponibilidad de los cuidados paliativos en todo el mundo
ha hecho que sea raro morir con dolor.
A pesar de que pocos de nosotros experimentaremos todos
los síntomas de la muerte, la mayoría experimentaremos
por lo menos uno, si no es que más. Aquí listamos algunos síntomas.

Estertor de muerte

Sospechábamos que el paciente no sobreviviría sin el
respirador. Un coágulo había subido por un vaso sanguíneo
a la parte trasera de su cerebro, y bloqueaba el flujo de
sangre al área que controla el estado de alerta. Se moriría
por no estar lo suficientemente despierto como para toser.
El ritmo del estertor de muerte comenzó cuando se le quitó
el tubo para respirar y continuó hasta que falleció. Era un
sonido de borboteo, de chisporroteo, como cuando se sopla
aire con una pajilla hacia el fondo de un vaso de agua. La
duración promedio desde el inicio de los estertores hasta
la muerte es de 16 horas. En su caso, fue de seis.
El estertor de muerte es un síntoma de problemas para
tragar. Normalmente, nuestra lengua sube a la parte
superior de la boca y lanza la saliva, los líquidos o la comida
hacia atrás. La epiglotis, una lengüeta que se encuentra en la garganta, se mueve hacia adelante para impedir que la
sustancia tragada penetre a las vías respiratorias.
En el proceso de morir, la sinfonía de tragar se convierte en
una cacofonía de movimientos débiles y fuera de tiempo.
A veces la lengua lanza la saliva hacia atrás antes de que la
epiglotis tenga tiempo de tapar la entrada a las vías
respiratorias. Otras, la lengua no empuja nada y la saliva
baja por las vías respiratorias hasta los pulmones como
un flujo constante. El estertor de muerte es el intento de los pulmones por respirar a través de una capa de saliva.
A pesar de la crudeza del sonido, no es probable que el
estertor de muerte sea doloroso. La presencia del estertor no
se correlaciona con síntomas de insuficiencia respiratoria.
Como sucede con frecuencia en la medicina, damos un
tratamiento con base en la intuición. Para disminuir el
volumen del estertor de muerte, recetamos medicamentos
que reduzcan la producción de saliva. En ocasiones
silenciamos el estertor con éxito. Las más de las veces,
apaciguamos nuestra preocupación instintiva por un ruido
que quizá suena peor de lo que se siente. Sin lastimar a
nuestros pacientes, damos tratamiento a los testigos que
seguirán viviendo.

Falta de aire

La paciente era una mujer enjuta de ochenta y tantos
años que fumó durante siete décadas. Los cigarros
provocaron que, de tener una textura esponjosa, sus
pulmones se convirtieran en bolsas de plástico infladas que
se colapsaban cuando exhalaba. Era como si tratara de
aplastar una bolsa de compras para sacarle todo el aire.
La falta de aire, esa incómoda sensación de tener dificultad
para respirar, es uno de los síntomas más comunes del fin
de la vida que los médicos tratan de aliviar.
¿Cuál es el tratamiento? Los opiáceos, por lo general morfina.
A veces las personas preguntan por qué el tratamiento para
una respiración dolorosa es un medicamento que puede
debilitar la respiración. Uno pensaría que los opiáceos
empeorarían la falta de aire. La respuesta reside en la
definición de por qué la falta de aire es incómoda en primer
lugar.
Algunos investigadores piensan que la incomodidad por la
 falta de aire proviene de la discordancia entre la respiración
que nuestro cerebro desea y la capacidad de los pulmones para inflarse y desinflarse. Los opiáceos brindan alivio porque
sintonizan el apetito de aire de nuestro cerebro con la cantidad
que nuestro cuerpo les puede proveer. Desaparecen la “falta”
de la falta de aire.
Otros creen que la cantidad de morfina necesaria para calmar
la falta de aire puede tener muy poco efecto en nuestra
capacidad de respirar. Puesto que la falta de aire y el dolor
activan partes parecidas del cerebro, los opiáceos podrían
funcionar sencillamente silenciando las señales de dolor del cerebro.
La paciente cambió sus cigarrillos por una mascarilla de
respiración cuando llegó al hospital. Dejó de fumar por enésima ocasión e hizo planes para irse a casa y volver a vivir de manera independiente. Unos cuantos días después, su frágil armazón se cansó. Murió con tratamiento paliativo.

Agitación terminal

Dos días antes de morir, mi abuelo se puso a gritar.
 “¡Abran esa puerta y déjenme salir! ¡Ya mismo!
¡Es un engaño! ¡Abran esa puerta!”.
Eran los gritos de un niño perdido. Las cejas de mi abuelo,
que habían ido desapareciendo con los años de afuera hacia
adentro de manera que solo quedaba como un centímetro
de vello gris hasta la mitad, se inclinaban una hacia la otra.
Hasta entonces, nos habíamos preparado para que estuviera
ido y ausente. No para ese delirio agitado. No para la ira.
Una poeta famosa escribió una vez que “morir es un arte,
como todo lo demás”. Para los doctores de cuidados paliativos,
los artistas de la muerte, la agitación terminal es la rebelión del sujeto contra el creador. Es rara, pero puede ser difícil
presenciarla cuando sucede.
En lugar de irse yendo calmadamente, el moribundo puede
gritar e intentar levantarse de la cama. Es posible que sus
músculos se crispen o contraigan. Su cuerpo puede parecer sometido a un tormento.
Hay causas físicas de la agitación terminal como la retención
de orina, el sofoco, el dolor y las anomalías metabólicas. Hay medicamentos que la aquietan. 
Sin embargo, es difícil dejar de lado el papel de la psique y lo espiritual.
Las personas que presencian la agitación terminal a menudo
creen que se trata de la respuesta existencial del moribundo
ante la cercanía de la muerte. Una agitación intensa puede
ser la manera más visceral en la que el cuerpo humano puede reaccionar ante la devastación de la inercia. 
Nos retorcemos y lloramos cuando llegamos al mundo y,
a veces, hacemos lo mismo cuando lo dejamos.




20170628


¿ Por qué el 911 y el 112 

son los números de emergencias 

más usados en todo el mundo ?


En la mayor parte del mundo, el número de emergencias al que tenemos que llamar para contactar rápidamente con la policía, los bomberos o una ambulancia es 911 o 112. Ambos son cortos y sencillos de recordar, pero ¿Por qué se eligieron esos números exactamente?

La necesidad de crear un número específico al que poder acudir en caso de accidente comenzó a discutirse en el Reino Unido en 1935. En noviembre de ese año, un terrible incendio en un edificio del centro de Londres acabó con la vida de cinco personas. Se da la circunstancia de que varios vecinos trataron de avisar a los servicios de emergencias contactando con los operadores de sus servicios de telefonía marcando el número cero, pero las líneas estaban saturadas.

¿Por qué 999 y no 111?

Incluso aunque hubieran logrado contactar con un operador, el incidente demostró que ninguno de estos profesionales estaba entrenado para gestionar emergencias, así que el gobierno británico decidió habilitar un número especifico que se pudiera marcar desde cualquier teléfono de forma gratuita. Ese número sigue usándose hoy en el Reino Unido y muchos otros países de la esfera anglosajona. Es el 999.
¿Por qué tres nueves? La explicación está en los teléfonos de las cabinas públicas británicas que funcionaban desde 1925. En aquel entonces era imposible llamar desde esas cabinas sin haber metido antes una moneda con la excepción del cero, que era el número para ponerse en contacto con un operador. Había que modificar los contactos eléctricos de las cabinas para que hubiera otro número que se pudiese marcar sin necesidad de pagar, y se eligió el 9. La razón es que es un número muy sencillo de encontrar en el dial, incluso aunque tengamos que marcar a oscuras.
Se decidió que fueran tres nueves para evitar llamadas accidentales a emergencias. Esa es también la razón por la que decidieron no elegir el uno para las dos siguientes cifras. En las cabinas de la época era relativamente fácil marcar un uno (e incluso dos unos) accidentalmente.

Elegir una secuencia más corta

El 911 llegó mucho más tarde. En 1968, diversos incidentes a los que la policía y los servicios sanitarios llegaron tarde convencieron al gobierno estadounidense de la necesidad de implantar un número de emergencias en todo el país. En aquel entonces había muchos números de larga distancia y de empresas que comenzaban por uno, así que se optó por el 9, que ya funcionaba con éxito en Reino Unido. Sin embargo, para las dos siguientes cifras se eligió el uno. La razón dada fue que, en los teléfonos antiguos, había que esperar demasiado tiempo a que el nueve recorriera todo el dial analógico para marcarse y se perdían segundos preciosos. Había nacido el 911.
Esa misma filosofía de marcar el número más corto posible fue la que primó en la decisión de elegir el 112. La Administración Europea de Telecomunicaciones recomendó su uso en 1972, pero no comenzó a funcionar hasta 1991. El número forma parte del estándar GSM, de manera que puede usarse sin saldo y desde la pantalla bloqueada de cualquier teléfono.
Se da la circunstancia de que, hoy en día, los números de emergencias se redireccionan en cada país aunque el número local sea otro. En otras palabras, en Reino Unido accederemos a la misma centralita de emergencias tanto si marcamos el 112, como el 999. Igualmente, el 911 funciona en todos los países suscritos a la Asociación Europea de Libre Comercio. Si marcamos el 911 en el Reino Unido o en otro país Europeo también funcionará.
Ya sabemos otra cosa más. 
http://es.gizmodo.com

20170626


ESPAÑA - BORREGOS - FRANQUISTAS

Los más jóvenes ni siquiera habrán oído hablar de ello, pero hubo un tiempo en el que en España el sistema de gobierno fue una República. 
Sí, así es, igual que en Alemania, Austria, Croacia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Islandia, Italia, Polonia, Portugal o Suiza. Éstas son sólo algunas repúblicas europeas en las que no hay demonios ni dragones asesinando a la gente por las calles. 
 Pero mira tú por dónde, el hecho de que no hubiera caciques, ni señores, ni nobleza ni reyes, no era del agrado de los que creían que por derecho el país les pertenecía. Por eso se levantaron en armas contra el gobierno legítimamente elegido en las urnas y montaron todo el tinglado de la Guerra Civil.
A ojos de los legos hubo una guerra fratricida en la que ganó el mejor, y por eso el mejor mereció gobernar, pero no se plantean en ningún momento cuáles fueron las causas por las cuales comenzó dicho enfrentamiento. 
A la ciudadanía le venden el cuento de que España iba mal y entonces surgieron los “salvadores de la patria” que nos salvaron del Apocalipsis. Ninguna mención a que una minoría armada atacó y derrocó a un gobierno legítimamente elegido por la mayoría de los votantes, con la ayuda de Hitler y de Mussolini, por cierto. 
Si hoy en día el ejército se levantara en armas contra el gobierno actual para derrocarlo y poner al mando a un militar todo el mundo nos echaríamos las manos a la cabeza, pero ese mismo hecho acontecido en 1936 se cuenta como si se hubiera salvado al país de una hecatombe gracias a los valientes que le robaron el poder al pueblo.
A la supuesta “Guerra Civil” siguieron 40 años de dictadura militar y eclesiástica (la Iglesia siempre estuvo del lado de los golpistas), y claro, entre las prioridades de la dictadura siempre estuvo la aniquilación de los disidentes de izquierda y de su pensamiento progresista que abogaba por el reparto justo de la riqueza y el desarrollo de los derechos sociales y laborales. 
Durante esos 40 años, entre fusilados, exiliados, torturados y amedrentados, el pensamiento de izquierdas en nuestro país quedó reducido a la mínima expresión, el miedo y la obediencia al poder se asumió como condición necesaria para la supervivencia, y la religión impregnó todos los rincones de la sociedad con sus homilías aleccionadoras que orientaban al pueblo inculto para que sufriera en silencio el abuso de las oligarquías porque su premio estaría en la otra vida.

40 años de dictadura y otros 40 de impunidad

¿Y qué podemos esperar de 4 décadas de represión y otras 4 décadas de adoctrinamiento?, 
Pues evidentemente lo que tenemos hoy: una sociedad que admira al poder, a la nobleza, a la monarquía y al rico del pueblo, una sociedad que asume como “normalidad democrática” que miles de compatriotas suyos estén enterrados en las cunetas del país, una sociedad que piensa en su mayoría que los asuntos de política la tienen que llevar los expertos (los ricos), una sociedad que se cree inútil para participar en política y que en muchas ocasiones ni siquiera le interesa saber qué ocurre con los dineros que todos aportamos vía impuestos para el bien común, una sociedad que ve a un político trajeado vociferando mentiras en un mitin y dice: “que bien habla este señor”.
En definitiva una sociedad aborregada que va por el camino que le marcan los pastores políticos, económicos y mediáticos. 
No tenemos que fijarnos nada más en esos vergonzosos y multitudinarios recibimientos que se hacen a folclóricas, deportistas, alcaldes y demás defraudadores multados o condenados por defraudar a la hacienda pública: miles de ciudadanos acarician el lomo de sus referentes vitales, aunque esos admirados personajes participen en el juego de dejar a sus hijos sin futuro. 
Se admira al rico ladrón, se sueña con ser como ellos, se mantienen y se toleran el machismo, el racismo y la xenofobia, se subvencionan organizaciones y fundaciones franquistas, se fomentan comportamientos fascistas en el deporte, y todo parece normal a ojos de los ciudadanos, y para más inri los medios de comunicación generalistas fomentan y se benefician de esa ola de pensamiento retrógrado a cambio de prebendas económicas, y ocultan, falsean o modulan la información para que sus audiencias sigan viviendo en la misma farsa mientras ellos se llenan los bolsillos al grito de “¡España, España, España!”. 
Y, mientras tanto, estos españolazos, están expoliando el país.
Sólo la llegada de nuevas tecnologías y el surgimiento de las redes sociales han conseguido darles voz a los que conocían nuestra realidad histórica y nuestra realidad social.


Miqui Madrid


20170625



Cómo reconocer 
a un PPPP (re-ppero)


Javi Castillo, un famoso humorista valenciano, 
suele interrumpir sus monólogos haciendo una 
pregunta muy sencilla:
 “¡aquí alguien del pp, tiene que haber, 
porque si no…..no me salen las cuentas!! .”

El PP cuenta 
con sus votos 
Zombies. 
Esos que van 
a votar sin 
pensar, movidos 
solo por el ansia 
de devorar a los 
 "rojiprogres" y son muchos.
Sin embargo, 
la izquierda, es mas crítica y  muchos se quedarán 
en casa de modo que,  los pseudofranquistas, 
pueden volver a ganar.
Este triste País, es para echarle de comer aparte.


A mí, “tampoco me salen las cuentas”. 
Y por tanto, en esta entrega de la guía útil para salir a la calle 
sin que nos caiga la cara de vergüenza, quiero hablar de uno 
de los fenómenos más extraños del ya, de por sí, extraño 
 comportamiento humano

Es un fenómeno que, no por extraño, deja de ser de lo 
 más habitual y nos puede aportar mucha luz para entender 
cómo hemos podido llegar a tener el panorama político actual 
que padecemos.




Los últimos estudios sociológicos que se han realizado, a tal efecto,   demuestran que uno de los motivos que explica este misterio, es la existencia de los “re-pperos” (del PP Pero Pobre).


Son una tipología de personas que desafían todas las leyes del 
 entendimiento y la lógica. 

Son personas de clase 
media-baja, trabajadores, 
 asalariados de toda la vida 
y con sueldos de mierda que 
votan insistentemente al pp.


No hay que confundir a los “pperos” 
(gente que vota al PP para defender 
sus propios intereses) con los 
re-pperos” (que también votan al 
pp y nadie entiende por qué). 

Es un grupo muy mimetizado dentro de la sociedad 
y a simple vista pasan desapercibidos. Pero con 
un poco de atención son fácilmente identificables. 


Lo primero que necesitamos, para localizarlos, es un 
 pequeño cuestionario como el siguiente:




Ante cualquier pregunta sobre la actualidad 
política ellos dirán que “no entienden de política” 
que son “apolíticos”. Pero curiosamente, 
votarán al pp (lo que confirma su premisa de 
 que, efectivamente, no entienden de política).



Si les preguntas qué opinan sobre los casos 
de corrupción de los políticos, ellos 
responderán que “son casos aislados”. 
Por el contrario, la respuesta será muy 
diferente si el político corrupto es de izquierdas.



Si les preguntamos sobre el paro y la 
situación laboral del país no tardarán 
mucho en sacar el recurrente tema de 
los inmigrantes. Y es que, curiosamente, 
ellos se sienten unos “pobres desgraciados” 
(como los son la mayoría, en el mejor sentido 
de la palabra) y tienen una enfermiza 
animadversión hacia todos aquellos que 
lo pasan aún peor y se encuentran en 
una situación bastante más desfavorecida. 
 Este curioso aspecto, lo trataremos más adelante.



Si después de estas preguntas, notáis 
una cierta incomodidad, es normal. Tened 
en cuenta que esta gente son de la teoría 
de que en esta vida más vale “no significarse” . 
Claro que, gracias a esta útil guía, se les ha 
acabado el tiempo del anonimato.





Una vez identificado al sujeto “re-ppero”, es importante entender a qué se debe este extraño comportamiento y qué causas son las que lo provocan:




La catarsis del lameculos: Fenómeno 
psicológico por el cual, personas de la 
clase media-baja con recursos económicos
 limitados, acaban 
pensando que si están con los que tienen 
el poder y el dinero “algo acabará pegándose”. 
Y a pesar de que jamás ven el más mínimo 
resultado a lo largo de toda su miserable vida, 
les da igual y continúan apoyando a los ricos 
y a los poderosos.



La catarsis del desgraciado: Este desviamiento 
psíquico está inversamente relacionado con el anterior 
y por el mismo proceso mental por el que piensan que 
la riqueza se puede pegar, también creen que la pobreza 
se puede contagiar. Es por este motivo que estos 
 sujetos desarrollan una enfermiza animadversión 
hacia aquellas personas que todavía son más 
pobres que ellos, como marginados, inmigrantes, etc..



De la convivencia de estas dos catarsis en la psique 
de estos sujetos se derivan actitudes como 
las de despreciar la enseñanza pública y querer 
llevar a sus hijos a colegios privados o concertados, 
empeñándose hasta los ojos, arremeter con rabia 
contra políticos de izquierda que tienen una 
posición económica superior a la de ellos.



También padecen el Síndrome de Estocolmo
ya que se encuentran mejor si apoyan a aquellos, 
que tan pronto como puedan, y gracias a sus 
votos, recortarán sus derechos, endurecerán sus 
condiciones laborales, y les joderán todo lo que puedan. 

Ellos así están felices y contentos. 


También hay algunos psicólogos que ven 
influencias de prácticas masoquistas que 
más allá del sexo, disfrutan infligiéndose 
dolores sociales y económicos. Pero esta no 
es mi especialidad y no tengo mucha más 
información al respecto.




Con todo esto, ya sois capaces de localizar a 
los re-pperos  y reconocerlos.




También los podréis reconocer
 por el tufo a rancio.


Y por mi parte, añado unas 
estrofillas de Don Antonio Machado, 
que por lo visto, durante su vida se
 tropezó con más de uno de esta especie:

Este hombre no es 
de ayer ni de mañana

Es un fruto de 
la cepa hispana
No es una fruta madura 
ni podrida
Es una fruta vana

De modo que no os vayáis a confundir, 
no es una especie en riesgo de extinción.
........................................................................................................
Últimas noticias:
Un re-ppero, en el paro, 
va “a tope” con los recortes,
El diario “The New York Times” ofrece hoy una entrevista a 
Gregorio Carvajal, un madrileño de 30 años que, pese a 
estar en el paro y verse afectado directamente por la reforma
 laboral, defiende a ultranza los recortes del Gobierno.
Carvajal ha tenido que separarse de su mujer y  vive ahora 
con sus padres, contento porque “perderlo todo me ha llevado 
a recuperar el calor familiar”. Según este re-ppero de toda la vida, 
“el anterior gobierno nunca se habría atrevido a tomar estas 
medidas necesarias que me han llevado a la calle”, por lo que 
felicita al actual Gobierno “por sus cojones”.
La entrevista termina con otra rotunda sentencia: 
Que me quiten todo lo que sea necesario para España. 
Todo menos mi derecho a votar al partido popular, 
en las próximas elecciones”.
O sea, que si es más tonto... no nace.
- PPPP (del PP, Pero Pobre), 
ahí los lleváis.
Recogido de aquí y de allá.